RUTA

SEMANA 1:

  • PASOS 1-10 según se describen abajo
  • Sábado en la noche: sesión de orientación y apoyo
  • Sábado – Viernes: estudio individual o colaborativo, si se desea
  • Sábado siguiente: discusión grupal en el repaso de la lección

SEMANA 2:

  • PASOS 11-13 según se describen abajo
  • Sábado en la noche: sesión de orientación y apoyo
  • Sábado – Viernes: estudio individual o colaborativo, si se desea
  • Sábado siguiente: discusión grupal en el repaso de la lección

Con base en el plan de estudio que se implementará en esta investigación bíblica, una secuencia de pasos recomendados ha sido ligeramente adaptada y reorganizada principalmente del documento Métodos de estudio de la Biblia | Estudio de la Biblia: presuposiciones, principios y métodos, indicado en la página de inicio. Si se desean mayores detalles, hacer clic aquí.

La secuencia de pasos no es una camisa de fuerza; podría cambiar, o requerir volver a alguno en la medida en que se avanza en el proceso de estudio.

Abajo se presentan, entonces, los pasos para realizar el estudio sistemático y exegético básico, incluyendo, respectivamente, algunas sugerencias para su implementación; es decir, para el PASO 1 la SUGERENCIA 1, para el PASO 2 la SUGERENCIA 2, y así sucesivamente. Recuerde que los PASOS 1-10 corresponden a la SEMANA 1 y los PASOS 11-13 a la SEMANA 2.

PASOS

  1. Dedique tiempo a la oración, no solamente como la primera actividad de su estudio exegético, sino como parte de su vida devocional, la cual debería ser de al menos una hora diaria. Recuerde que la conducción del Espíritu Santo es esencial para poder comprender e interpretar la Escritura.
  2. Seleccione para el estudio una versión de la Biblia que sea fiel al significado contenido en los idiomas en los cuales fue escrita originalmente la Biblia. Ejercite cuidado para no establecer puntos doctrinales principales sobre una traducción o versión de la Biblia.
  3. Elija un plan definido de estudio, evitando enfoques caprichosos y que no conducen a nada.
  4. Trate de captar el significado sencillo y más evidente del pasaje bíblico que se está estudiando.
  5. Procure descubrir los grandes temas fundamentales de la Escritura tal como se encuentran en los textos individuales, los pasajes y los libros. Dos temas básicos son (1) la persona y la obra de Jesucristo y (2) la perspectiva del gran conflicto.
  6. La Biblia es su propio intérprete y el significado de las palabras, y los pasajes, se determina mejor al comparar diligentemente escritura con escritura. Los relatos paralelos en la Escritura a veces presentan diferencias en detalle y en énfasis (por ejemplo, comparar Mat. 21:33-44, Mar. 12:1-11 y Luc. 20:9-18; o 2 Rey. 18-20 con 2 Crón. 32). Cuando estudie pasajes semejantes, examínelos primero con cuidado para estar seguro de que los paralelos se refieren realmente al mismo evento histórico. Por ejemplo, muchas de las parábolas de Jesús pudieron haber sido presentadas en diferentes ocasiones a diferentes auditorios y con fraseología diferente.
  7. Estudie el contexto del pasaje bajo consideración relacionándolo con las oraciones y párrafos que le preceden y le siguen. Trate de relacionar las ideas del pasaje con la línea total de pensamiento del libro bíblico que está estudiando.
  8. Determine el tipo literario que está usando el autor. Algún material bíblico está compuesto de parábolas, proverbios, alegorías, y profecías apocalípticas. Ya que muchos escritores bíblicos presentaron gran parte de su material como poesía, es provechoso usar una versión de la Biblia que presente este material en estilo poético, porque los pasajes que emplean lenguaje figurado no deben ser interpretados en la misma manera que los que emplean prosa. Reconozca que un texto bíblico determinado no necesariamente se conforma en cada detalle a las categorías literarias actuales. Sea cauteloso para no imponer estas categorías al interpretar el significado del texto bíblico. Es una tendencia humana encontrar lo que uno está buscando aun cuando el autor [escritor] no haya querido decir eso.
  9. Tome nota de la gramática y de la construcción de la oración para descubrir lo que el autor quiso decir. Estudie las palabras clave del pasaje comparando su uso en otras partes de la Biblia por medio de una concordancia y con la ayuda de léxicos y diccionarios bíblicos.
  10. En conexión con el estudio del texto bíblico, explore los factores históricos y culturales. Las Escrituras fueron escritas con el propósito práctico de revelar la voluntad de Dios a la familia humana. Por consiguiente, para que uno no interprete erróneamente algunas clases de declaraciones, es importante reconocer que fueron dirigidas a pueblos de las culturas del oriente y están expresados en sus modelos de pensamiento. La arqueología, la antropología, y la historia, pueden contribuir a entender el significado del texto. Entonces, tanto como le sea posible, averigüe las circunstancias históricas en las cuales fue escrito el pasaje por el escritor bíblico bajo la dirección del Espíritu Santo.
  11. Los adventistas creemos que Dios inspiró a Elena de White. Por tanto, se recomienda hacer uso de ellos ya que ofrecen una guía inspirada al significado de los textos sin agotar su significado o reemplazar la tarea de la exégesis (ver, por ejemplo, El evangelismo, p. 190; El conflicto de los siglos, pp. 204, 205, 653; El otro poder, pp. 33-36).
  12. Después de estudiar tal como se acaba de bosquejar, recurra a los diferentes comentarios y ayudas secundarias, tales como obras eruditas, para ver cómo han abordado otros el pasaje. Después, evalúe cuidadosamente los diferentes criterios expresados, desde el punto de vista de la Escritura como un todo.
  13. Como objetivo final, haga la aplicación del texto. Haga preguntas tales como: “¿Cuál es el mensaje y el propósito que Dios intenta trasmitir a través de la Escritura? ¿Qué significado tiene este texto para mí? ¿Cómo se aplica a mi situación y circunstancias hoy en día?” Al hacerlo así, reconozca que, aunque muchos pasajes bíblicos tienen un significado local, no obstante contienen principios eternos aplicables a cada edad y cultura.

sugerencias

  1. Retírese a un lugar apartado, libre de distracciones, preferiblemente en las primeras horas de la mañana. Es vital orar no solo al inicio, sino también durante y después del estudio. La actitud es la del estudiante humilde y sumiso, dispuesto a ser enseñado por el Espíritu Santo que entiende que las cosas espirituales se disciernen espiritualmente (1 Cor. 2:14; Luc. 11:13; Sant. 1:5).
  2. En orden de preferencia, disponibilidad y no olvidando que todas tienen ventajas y desventajas menores, se listan algunas traducciones:
    – Reina-Valera 1995
    – Nueva Reina-Valera 2000
    – Reina-Valera 1960
    – La Biblia Latinoamérica (1972)
    – Biblia de Jerusalén (2011)
    – La Biblia de las Américas (1986)
    – Traducción en Lenguaje Actual (2006)
    – Dios Habla Hoy (1996)
    – Nueva Versión Internacional (2015)
    – Nueva Biblia al Día (2008)
    – Nueva Biblia Española (1975)
    – Nueva Traducción Viviente (2010)
    – La Palabra de Dios para Todos (2012)

    Si no se dispone de ellas en papel, pueden encontrarse en aplicaciones telefónicas, tales como MyBible y Bible.

    También puede acceder al sitio web https://www.biblegateway.com/

    Más información: Entender las Sagradas Escrituras (páginas 113-135)

  3. Para esta práctica, hemos establecido que será un estudio por tópico. Dicho tópico es el juicio investigador, el cual será estudiado en Daniel 7, 8 y 9; Mateo 22:1-14 y Hebreos 9:23-28.
  4. Análisis comprensivo del texto, no especulativo ni antojadizo.
  5. Todo estudio de la Biblia tiene que ser Cristocéntrico (Juan 5:39).
  6. Encadenar los textos utilizando Biblias de estudio que tengan un sistema de referencia cruzada, tal como la Biblia de Estudio Andrews (Reina-Valera 1995). Puede alimentar dichos sistemas o crear uno propio.
  7. Analizar el contexto inmediato y no inmediato del pasaje, verificando su conexión, la cual no estará necesariamente limitada por capítulos, versículos o títulos que las traducciones pudieren haber agregado.
  8. El texto bajo interpretación puede estar compuesto de una o más categorías:
    • Historia
    • Poesía y literatura sapiencial
    • Profecía (clásica y apocalíptica)
    • Evangelios y epístolas
    • Símbolos, alegorías y parábolas

    Más información: Entender las Sagradas Escrituras (páginas 199-347)

  9. Análisis sintáctico, morfológico y semántico mediante el uso de la aplicación telefónica MyBible, Bibleworks, o https://www.bibliatodo.com/. También puede usar la siguiente concordancia y léxicos:
  10. De momento, solo explorar aspectos históricos, culturales, arqueológicos y antropológicos en la introducción a los libros en Biblias de estudio, tal como la Biblia de Estudio Andrews (Reina-Valera 1995), en el Diccionario Bíblico Adventista y en el Comentario Bíblico Adventista ( http://www.jovenes-cristianos.com/tecnologia/biblioteca-cristiana-adventista.html ).
    También puede consultarse:
  11. Entre muchos otros, puede específicamente consultarse el libro Cristo en su Santuario. Si se desea revisar cuál es el propósito de los escritos de Elena de White y su relación con la Biblia, así como principios de interpretación y su aplicación en la vida propia y consejo a otros, se recomienda consultar la obra Cómo leer a Elena de White.
  12. Comentario Bíblico Adventista ( http://www.jovenes-cristianos.com/tecnologia/biblioteca-cristiana-adventista.html ). En vista del carácter singular del tópico bajo estudio, no se recomienda el uso de otros comentarios. Además, pueden consultarse las siguientes ayudas secundarias:
  13. La aplicación no debe ser subjetiva ni antojadiza, sino objetiva, basada en el texto. Además, no se trata solamente de una aplicación teórica, ¡vivamos la Palabra de Dios! No es un asunto meramente intelectual, sino uno de gozosa práctica del mensaje bíblico y su poder transformador, lo cual conducirá a nuevos estadios de conocimiento.

A continuación se presenta un complemento para aquellos que elijan una perspectiva profética apocalíptica para estudiar el juicio investigador.

Al interpretar la profecía, tenga en cuenta que:

  1. La Biblia afirma el poder Dios para predecir el futuro (Isa. 46:10).
  2. La profecía tiene un propósito moral. No fue escrita simplemente para satisfacer la curiosidad acerca del futuro. Algunos de los propósitos de la profecía son: fortalecer la fe (Juan 14:29) y promover una vida santa y la preparación para la segunda venida (Mat. 24:44; Apoc. 22:7, 10, 11).
  3. El centro de atención de muchas profecías está en Cristo (tanto en su primer advenimiento como en el segundo), la iglesia y el tiempo del fin.
  4. Las normas para interpretar profecía se encuentran dentro de la misma Biblia: la Biblia menciona profecías de tiempo y sus cumplimientos históricos, el Nuevo Testamento cita específicamente cumplimientos de profecías del Antiguo Testamento acerca del Mesías y el mismo Antiguo Testamento presenta a personas y eventos como tipos del Mesías.
  5. En la aplicación que el Nuevo Testamento hace de las profecías del Antiguo Testamento, algunos nombres literales llegan a ser espirituales: por ejemplo, Israel representa a la iglesia; Babilonia, a la religión apóstata, etc.
  6. Hay dos tipos generales de escritos proféticos: la profecía no apocalíptica, como se encuentra en Isaías y Jeremías, y la profecía apocalíptica, como se encuentra en Daniel y el Apocalipsis. Estas clases diferentes tienen características diferentes:
      1. La profecía no apocalíptica se dirige al pueblo de Dios, la profecía apocalíptica es más universal en su alcance.
      2. La profecía no apocalíptica con frecuencia es de naturaleza condicional, declarando al pueblo de Dios las alternativas de las bendiciones si obedecen y las maldiciones si desobedecen; la profecía apocalíptica recalca la soberanía de Dios y su control sobre la historia.
      3. La profecía no apocalíptica con frecuencia salta de la crisis local, al día de Jehová del tiempo del fin; la profecía apocalíptica presenta el curso de la historia desde el tiempo del profeta hasta el fin del mundo.
      4. Las profecías de tiempo en la profecía no apocalíptica generalmente son largas, por ejemplo, los 400 años de la servidumbre de Israel (Gén. 15:13) y los 70 años de la cautividad babilónica (Jer. 25:12). Las profecías de tiempo en la profecía apocalíptica generalmente están expresadas en términos cortos, por ejemplo, 10 días (Apoc. 2:10) o 42 meses (Apoc. 13:5). Los períodos de tiempo apocalípticos representan simbólicamente períodos mayores de tiempo real.
  7. La profecía apocalíptica es altamente simbólica y debe ser interpretada en conformidad con esto. Al interpretar símbolos, pueden usarse los métodos siguientes:
      1. Busque interpretaciones (explícitas o implícitas) dentro del mismo pasaje (por ejemplo, Dan. 8:20, 21; Apoc. 1:20).
      2. Busque interpretaciones en otra parte en el libro o en otros escritos por el mismo autor.
      3. Usando una concordancia, estudie el uso de los símbolos en otras partes de la Escritura.
      4. Un estudio de los documentos del antiguo Cercano Oriente puede arrojar luz sobre el significado de los símbolos, aunque el uso bíblico puede alterar esos significados.
  8. La estructura literaria de un libro con frecuencia es una ayuda para interpretarlo. La naturaleza paralela de las profecías de Daniel es un ejemplo de esto.